Dos de la mañana

Hoy, por primera vez en mucho tiempo, las manecillas del reloj van hacia atrás. Ahora sí creo que cualquier tiempo pasado fue mejor. Cuando escribo esto son las dos de la mañana y mi hija no puede dormir. Llora. Y sus lágrimas son las mías.

Paso, posiblemente por uno de los peores momentos de mi vida. He dejado de ser yo, para convertirme en alguien que sólo se parece a mí en el físico. Mentalmente estoy muy afectado y desgraciadamente los que más lo sufren son los que se encuentran a mi alrededor. Intento hacerme el fuerte y hacer como que no pasa nada, pero no puedo.

Mi nivel de autoestima desciende a velocidad de crucero. No quiero ni pensar en el mañana porque no sé cómo estaré cuando termine de escribir esto. Por la cabeza se me pasan montones de cosas que podría hacer pero en todas soy un cobarde.

Hay quien dijo una vez que cuando se cierra una puerta se abre una ventana, pero el problema resulta cuando la casa está construida en roca y no tiene ventanas. También sé que la vida son dos días y uno de ellos está lloviendo. Pero aún así, las fuerzas se agotan a cada día que pasa. La ilusión por recuperar mi forma de ser se disuelve cual azucarillo en el café. Tengo ganas de que pase el tiempo lo más rápido posible, señal inequívoca de que cada vez queda menos para el final. Quizás sea un poco dramático, pero el que me conoce sabe que esto no es hablar por hablar.

La situación me supera y no tengo fuerzas para seguir luchando. Lo he intentado todo, pero no encuentro soluciones. Además, no quiero caridad, entre otras cosas porque quizás no lo merezca. Y también puede resultar un poco injusto con los que me rodean. Mi escala de valores varía con el paso de los días, algo lógico en un momento tan duro. Posiblemente habrá quien piense que estoy exagerando todo y que lo hago por dar pena. Pensad lo que queráis. Me da igual.

Este texto no se trata de una declaración de intenciones ni nada parecido. SÓLO ESCRIBO EN MI BLOG LO QUE ME APETECE. No hay posibilidad a dobles o triples interpretaciones. Además, no necesito que interpretes lo que escribo. Aquí sólo pone lo que yo quiero que ponga. Eso sí, posiblemente hoy sea el Día I DB (después de Bendala); al menos al Bendala que todos conocen.