Estoy loco, lo sé. Correr 42 kilómetros es algo que sólo se le ocurren a unos pocos 'tarados'. Pues yo soy ahora uno de esos tarados. He conseguido el apoyo de un buen número de amigos y conocidos y voy a intentar correr la maratón de Sevilla de febrero de 2012.
Se trata de un reto personal pero sobre todo mental, ya no se trata de una competición meramente física, aunque evidentemente juegue un papel crucial. Ya me he puesto manos a la obra y todo va adecuándose a los plazos previstos.
Con los primeros entrenamientos he descubierto algo que desconocía y no es otra cosa que el placer de correr. Yo jugué durante varios años al baloncesto y corría en los entrenamientos por necesidad, pero nunca lo hice por diversión. El otro día recorrí ocho kilómetros y medio en una hora -una cifra baja, pero solo es el principio- pero lo mejor de todo es que disfruté corriendo.
Y con esto de correr la maratón -qué lógicamente acabará siendo un reportaje para Odiel y CNH- quiere superarme metas y pensar que cualquier cosa que te plantees en la vida lo puedes conseguir si verdaderamente tienes fe en ello. Yo creo que puedo completar la maratón. Espero no fallar.