domingo, 29 de mayo de 2011

Lecciones de clase

Hay quien dice que una retirada a tiempo es una victoria. Es posible, pero creo que su marcha, consciente de que el año que viene es imposible mejorar lo ocurrido en esta campaña, nunca será celebrada. Ni por él, ni por nadie. Pierden todos.

Su rueda de prensa estuvo cargada de clase. Ni un sólo reproche, ni un mal gesto, ni una mala palabra. Nada. Sólo el temblor de su barbilla delataba una profunda tristeza por tomar la decisión correcta aunque la más dolorosa. De poco habían servido las súplicas de sus compañeros de viaje, tan hundidos, o más que él.

Manolo pasó todo su discurso cabizbajo, sin mirarlo, reflejando aquello de ojos que no ven, corazón que no sientes. Pero de sus ojos brotaron lágrimas. Lágrimas de tristeza porque él, como Alejandro y Sergio son conscientes de que el proyecto se resquebraja. Ya nada será lo mismo sin el maño. Podrán pasar mil año, pero el San Roque nunca tendrá un entrenador como él. Aunaba el fútbol moderno con una exquisitez en los banquillos y ante la prensa casi insólita, aunque quizás esto lo haya aprendido en La Masía.

Su forma de ver la vida no dejó indiferente a nadie en Lepe y se ganó el cariño de una afición que siempre lo tendrá en su recuerdo. Y no porque firmara la mejor temporada de su historia, sino por todo lo que le ha rodeado en este año. Todo ese cariño se ha devuelto con creces. Sergio lo sabe y por eso afirma que vaya donde vaya, siempre estará muy pendiente de lo que haga el San Roque.

Lo más duro de las relaciones llegan con el momento de la despedida. Sergio mostró su fidelidad pero se sintió engañado con el paso de la relación. Seguramente llegó a pensar que esa relación no acabaría nunca y que serían felices y comerían perdices. Lo han sido, pero probablemente el nuevo 'amor' que llegue al banquillo del San Roque no haga olvidar al preparador maño.

Para mí se marcha más que un entrenador, un amigo y eso duele. He demostrado ser un 'fatiga' llamándolo constantemente para cosas triviales, pero siempre me atendió. Sabía qué decir en qué momento y cuando triunfe en el mundo del fútbol profesional-dentro de no muchos años- espero que nunca se olvide de los que nos consideramos amigos. Un abrazo crack.